El acolchado o empajado consiste en extender una capa de materia orgánica sobre el suelo, alrededor de las plantas. Los acolchados permiten: aportar materia orgánica a las plantas, retener la humidad, proteger los bulbos de heladas, abrigar numerosos microorganismos benéficos (lombrices, cochinillas, ciempiés), ofrecer al jardín un aspecto limpio y acabado,… Para un acolchado eficaz, el espesor recomendado es de al menos 5 centímetros.
Acolchado de paja de trigo
Posee la ventaja de que es un producto que se encuentra bastante fácilmente en el campo, por lo que su coste es nulo. El inconveniente es que hay que renovarlo cada año.
Cortezas (gruesas) de pino
El pino lo podemos encontrar fácilmente en los puntos de venta hortícolas. La duración de este acolchado es de varios años, es muy eficaz. El problema es que debemos utilizarlo preferiblemente sobre suelo calcáreo, ya que tiende a acidificar el suelo.
Corteza (finas) de pino
La ventaja es su descomposición, que aportará humus a la tierra. El inconveniente es que se degrada más rápidamente que la gruesa, es menos duradera y, por tanto, algo más cara.
Puzolana
Lo bueno de la puzolana es que imputrescible y que, además, aporta los minerales necesarios al crecimiento de las plantas. Pero su precio es elevado debido a sus lugares de producción.
Pizarra
Entre sus diversas ventajas encontramos que es 100 % natural, obtenido por reciclaje. Además resiste a los vientos, limita el adventicios, reduce la frecuencia de regadío, posee PH neutro,… su principal inconveniente es que es bastante pesado de manipular.
Vainas de habas de cacao
Es un acolchado muy nutritivo para las plantas. Además, desprende un olor muy agradable cuando llueve. Sosa con la humidad. Ellas debieron sólo 2 temporadas. Su precio queda elevado.
Pajitas de lino
Su coste es bajo cerca de los lugares de producción y aporta humus en el momento de su degradación. Los problemas son que se vuelan con el viento y que es poco duradero.
Pajitas de cáñamo
Presentan una excelente durabilidad y un buen aporte en materia orgánica. Su cultivo todavía es marginal, por lo que la distribución está poco expandida.